lunes, 14 de julio de 2014

Hay un Lugar Do Quiero Estar


Hay un Lugar Do Quiero Estar

Texto: Salmos 73:28


Pero en cuanto a mí, el acercarme a Dios es el bien. He puesto en Jehová el Señor mi esperanza, para contar todas tus obras.

Introducción:


Es la tendencia del cristiano de buscar un lugar en la cual podemos estar más cerca de Dios. Cuando sentimos la presencia de Dios en nuestra vida en cierto lugar nos queremos quedar ahí y nunca apartarnos. Así le paso a Jacob cuando dijo: “Ciertamente Jehová esta en este lugar, y yo no lo sabía” (Génesis 28:16). Y Pedro que fue más explícito en su deseo de quedarse en ese lugar donde Jesús fue transfigurado cuando dijo: Señor, bueno es para nosotros que estemos aquí, si quieres, hagamos aquí tres enramadas; una para ti, otra para Moisés, y otra para Elías (Mateo 17:4) ¡Qué bueno es sentir la presencia de Dios! ¡Qué Bueno es estar en un lugar donde podemos sentir la presencia de Dios en nuestras vidas! Por ese cantamos” “Hay un Lugar do Quiero Estar Muy cerca de mi Redentor. Allí podre yo descansar, al fiel amparo de Su Amor” (Himno 11, Himnos de Cantos Espirituales, Star Bible Publications).

Dios es Amor – 1 Juan 4:8


 
 
 
 

Por eso, si queremos que otros se queden en el lugar donde está la presencia de Dios. Dice en 1 Juan 2:5: “pero el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él”. Nosotros debemos tener el Amor de Dios también en nuestras vidas. Al nosotros como Iglesia reflejamos ese amor de Dios y demostramos que nos amamos los unos a los otros al mundo, podemos entonces llevarlos a Dios, quien es la fuente principal de AMOR.


Dios es Paz – 1 Tesalonicenses 5:23

Nuestro Dios es un Dios de Paz. “Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo”. Todo queremos estar en un lugar de Paz. No queremos entrar en un país donde hay Guerra y Pleitos. Es normal también si reunimos en un lugar donde los hermanos se están peleando unos con otros. Como dice en Santiago 4:1-2 “¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros? Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis” y Si nos visita alguien (Cristiano o no Cristiano) y notan que hay riña y animosidad entra los hermanos, ¿creen ustedes que se quedan? Hay un lugar do quiero estar y no es un lugar de guerra sino de paz. Jesús es que da la Paz. Pues el dijo: “Mi Paz os dejo…”

Dios es Luz – Juan 8:12


Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida. Notamos si una tienda o negocio está abierto si tienen las luces prendidas. Si esta todo oscuro entonces no entramos. Así es el lugar donde nosotros queremos estar con mucha luz. Especialmente si es la Luz de Dios alumbrando.  Una vez que entramos en ese lugar donde está la luz de Dios nos sentimos iluminados también. Sentimos ese calor, esa sabiduría, ese gozo por Dios es Luz. Por eso también Jesús nos dice “Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder” (Mateo 5:14). De igual manera si queremos traer las almas de las tinieblas seamos también luces.

Jesús Nos Está Preparando un Lugar – Juan 14:2-3


En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me voy y os preparo lugar, vendré otra vez y os tomaré a mí mismo, para que donde yo esté, vosotros también estéis. El estar aquí me agrada, yo me siento contento de estar aquí con ustedes, en la iglesia de Cristo. Pero hay un lugar donde anhelo estar mejor. Es el cielo. Quiero estar Cara a Cara con nuestro Dios y nuestro Salvador. Dondequiera que Jesús este, allí yo quiero estar. Cerca de mi Redentor. Allí podre yo descansar en las moradas que nos está preparando. Allí no habrá más dolor, trabajos, sufrimientos, ni corazones quebrantados. Vamos a la Ciudad de Paz y de Luz, la ciudad de Amor, la ciudad de Dios. (Himno Ciudad de Paz y Luz)

Podemos acercarnos a Dios ahora – Salmos 73:28


“Pero en cuanto a mí, el acercarme a Dios es el bien. He puesto en Jehová el Señor mi esperanza, para contar todas tus obras.” El esfuerzo del hombre de acercarse a Dios puede ser en vano; pero que tal si Dios se acerca a nosotros. Así como Jacob dijo: “Ciertamente Jehová esta en este lugar, y yo no lo sabía” (Génesis 28:16). Todo este tiempo alguien quien es mi amigo, quien me ama, quien dio su vida por mí, quien me consuela, estaba conmigo, y yo no lo sabía.  En Salmos 34:18 dice: Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón y salva a los contritos de espíritu. Notemos que para que Dios se acerque a nosotros debemos tener un corazón quebrantados y contritos de espíritu. Los que escucharon el mensaje de Pedro en el día de Pentecostés fueron compungidos de corazón y preguntaron: “¿Que podemos hacer?” El Apóstol Pedro responde como un martillo que quebranta la piedra “Arrepentíos y bautícese cada uno para el perdón de sus pecados” Hechos 2:37-38.

Conclusión:


Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones. Santiago 4:8. No titubees. No digas lo hago o no lo hago.  Elias le dice al pueblo de Israel: ¿Hasta cuándo vacilaréis vosotros entre dos pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; si Baal, id en pos de él. (1 Reyes 18:21).

Otras Citas:


Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras, 25 no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca. – Hebreos 10:24-25