Vestidos de Cristo

Vestidos de Cristo

(Gálatas 3:27)

“Pues todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos”

Lectura: Romanos 13:11-14 “Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos. La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz. Andemos como de día, honestamente; no en glotonerías y borracheras, no en lujurias y lascivias, no en contiendas y envidia, sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.”

Vivimos en tiempos difíciles. Hay corrupción en los gobiernos; en cuanto a la economía, el costo de la vida sube, el valor de la vida disminuye. Hay guerras, pestilencias, violencias en la calle, hogares de familias desintegradas por el alcoholismo y las drogas. Pero lo peor es las almas se están perdiendo, se nos están deslizando de nuestras manos como agua. ¿Será es que estamos perdiendo la buena batalla? ¿Acaso, las puertas del hades están prevaleciendo en contra de la iglesia?

¿Qué significa Vestirnos de Jesucristo? (Romanos 13:14)

1. Vestirnos del Nuevo Hombre (Efesios 4:24)
2. Vestirnos de la Armadura de Dios (Efesios 6:11)
3. Vestirnos como escogidos de Dios (Colosenses 3:12)
4. Vestirnos de Amor (Colosenses 3:14)

La Biblia nos amonesta que nos despertemos de ese sueño, de esa mortandad espiritual; porque la salvación esta cerca. Y si nos quedamos dormidos y muertos, entonces, lo que estaría mas cerca aun seria la condenación. ¿Acaso nos dice la Biblia: Levántate tú que duermes y te alumbrara Jesucristo? Vamos a vestirnos de Cristo. Vamos a vestirnos como hijos de luz. Te invito a que vista de la moda que no se va de moda.

4 Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda como ladrón. 5 Porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas. 6 Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios. 7 Pues los que duermen, de noche duermen, y los que se embriagan, de noche se embriagan. 8 Pero nosotros, que somos del día, seamos sobrios, habiéndonos vestido con la coraza de fe y de amor, y con la esperanza de salvación como yelmo (1 Tesalonicenses 5:4-8)

Aquí repite lo que Pablo le escribe a los romanos. Que se vistan de luz en medio de las tinieblas. Que se pongan la coraza de la fe y de amor. La coraza protege el corazón. De ahí proviene nuestra fe en Dios y el amor que debemos sentir hacia Dios y los hermanos. Nosotros demostramos nuestra fe y amor a Dios cuando amamos a nuestro prójimo. (Romanos 13:7-10) Equivale a no hacer ningún mal sino procurar el bien para todos. La Esperanza que debemos tener en Dios es representado por el yelmo (casco, Helmet). Satanás ataca por la mente y el quiere desanimarnos y poner pensamientos pesimistas. Por eso debemos protegernos con la esperanza que algún día podamos descansar de nuestros sufrimientos y trabajos para estar con el Gran Rey de Gloria.

Esto es lo que realmente significa ser vestidos de Cristo. ¿Quieres que Cristo sea tu vestimenta? Levántate, bautízate y lava tus pecados en la sangre de Cristo (Hechos 22:16).

La Verdad sobre la Eternidad

En cuanto al mas allá, la eternidad hay muchas especulaciones. Hay ideas seculares y mas aún hay ideas religiosas que son erróneas. Las teorías y creencias siempre han sido de mucho interés para el ser humano. Muchos creen que todo termina después de la muerte. Que somos polvo cósmico. Dicen que ya no hay vida después de la muerte. Pero recientemente la curiosidad del ser humano sobre el mas allá se ve en las películas de Hollywood sobre las cosas ocultas, fantasmas, ventas de figuras de ángeles, espiritismo y “yo veo gente muerta”, etc. A pesar que muchos no creen en estas cosas pero existe la duda. Bueno, la verdad que naturalmente Dios puso ese sentir en nosotros. Dice el sabio Salomón que Dios puso Eternidad en el corazón de los hombres. Todo lo hizo hermoso en su tiempo; y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin. (Eclesiastés 3:11)  

Podemos ver hoy en día muchas creencias y enseñanzas sobre la eternidad a través del budismo, hinduismo, secularismo, Islam e inclusive muchas sectas cristianas. Personas como Deepak Chopra y Louis Farrakhan pueden decir sus puntos de vistas sobre el mas allá; pero nadie puede describir mejor la eternidad como lo enseña nuestro Señor Jesucristo, quien murió y resucito de los muertos. El mismo experimento la muerte y la eternidad, pues él es eterno (Isaías 9:6; Juan 1:1-2). Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna. (1 Juan 5:20). Nadie sabe más sobre la vida después de la muerte sino Jesús.

Jesús nos Enseñó que:

1.      Todos seremos resucitados. Mateo 22:23-32; Juan 5:28. Hechos 24:15. Ladrón en la cruz. Hoy estarás conmigo en el paraíso.

2.      Habrá un juicio después de la muerte. Hebreos 9:28; Apocalipsis 20:11-12; Mateo 25:31. La cuestión no es si eres un pecador sino que es lo que haz hecho con tus pecados. Las enseñanzas de Jesús eran controversiales pero eran constantes.

3.      Separación de aquellos que confiaron en Dios y aquellos que no. Mateo 25:32-33; Juan 5:29. Habrá un juicio. Hay una película en Hollywood llamado: “All dogs go to heaven” (Todos las perros van al cielo). Yo no se de donde sacaron eso, pero Jesús dice claramente que: No todos van al cielo. Mateo 25:31-33. Solamente habrá dos grupos. Solamente hay dos alternativas el cielo o el infierno. No hay un lugar intermedio ni un purgatorio. Inventado por un Señor llamado Dante (La Divina Comedia). En Mateo 7:21-23, utilizamos esa cita para aquellos que predican falsas doctrinas pero en realidad el Señor Jesús enseña que aquellos que creen que están haciendo el bien irán al castigo eterno el infierno, Ellos creían que están haciendo el bien. Así que las personas buenas irán al infierno.

4.      Solamente las personas Confían en Cristo irán al cielo. Los que confían en Jesús irán al cielo Juan 14:2. Van al cielo. La Biblia describe el cielo como Calles de oro y mar de cristal. Yo no se como será físicamente pero la realidad es que Cielo será una ciudad gloriosa. Una ciudad eterna en donde aquellos que han sido lavados con la sangre de Jesucristo estarán para siempre en la presencia y la comunión con Dios Padre. . Estaremos en un estado completamente libres de pecados. No mas dolor ni sufrimientos Jesús dice Estaremos con el para siempre.

5.      Aquellos que no confiaron en Dios irán al castigo eterno irán al infierno. No es una idea no muy popular ni agradable. Porque la realidad es que nadie quiere ir al infierno. Jesús nos enseña mas sobre el infierno que ningún otra persona. Más gente creerá en Jesús si El no hubiese mencionado el infierno. Mi teoría es que ninguna otra persona ha muerto y paso el infierno como lo experimento Jesús. Jesús nos enseña que habrá llamas, el lloro y crujir de dientes. No se sentirá la presencia de Dios, pues estarán separados de Dios para siempre. Eso será un castigo tremendo castigo si no queremos pasar la eternidad para siempre solos y excluidos de su presencia.  Muchos dicen Como un Dios de Amor puede hacer esto. Pero esto es la demostración más amplia del Amor de Dios, nos dio la oportunidad de escoger nuestro destino. Podemos entender el Amor de Dios. Jesús hablo más del infierno que el cielo. La decisión es nuestra. Dios no preparo el infierno para nosotros sino para el diablo y sus ángeles. Así que el infierno es la alternativa que el hombre escoge y es nuestra responsabilidad lo que nos va a pasar. Si escogemos bien, iremos al cielo. Esto nos demuestra el Amor tremendo de nuestro Dios, que nos da el libre albedrío para nosotros escoger.

Eventos de  la Vida del Hombre hasta la Eternidad Job 14:14
Evento	Nacimiento	Vida	Muerte	Hades	Resurrección	Juicio Final	Eternidad
Citas	Génesis 3:16 Eclesiastés 3:2 Sal. 22:9-10	1 Juan 5:13 1 Tes. 5:23	Job 14:14 Salmos 90:10 Eclesiastés 8:8	Lucas 16:19-31 Hechos 2:27-36	Juan 5:28-29 1 Tes. 4:16	Romanos 14:10 2 Corintios 5:10 Hebreos 9:27	Mat. 25:31-46 Apo. 20:11-15

           

Dos cosas:

1.      Nadie va a decir que Dios me puso aquí en el infierno. Dios no va ponerte  en el infierno. Tú te pones tu mismo. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. (Juan 3:17). El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él (Juan 3:36)

2.      En el cielo, nadie va a decir que yo me puse aquí. Vamos al cielo por la Cruz de Cristo como un puede. Nadie viene al Padre sino por mí. En esa cruz, Jesús derramo su sangre para que seamos aptos para ir al cielo y estar para siempre de la presencia de Dios.

 A través del bautismo en las aguas escogemos la sangre de Cristo para ir al cielo como un puente de salvación. ¿Quieres aceptar su Amor? Ven mientas que cantemos el himno de invitación.  Ven