miércoles, 6 de marzo de 2019

Gracias a Dios por las Neveras


Gracias a Dios por las Neveras

Conservate Puro

Quizás este título, lo encontraras un poco raro. Las neveras hoy en día es una necesidad. Es uno de los electrodomésticos más comunes en el mundo. Cada casa tiene su nevera.  Sirve de un propósito importante. Conservar y mantener los alimentos, los líquidos, las frutas y los vegetales frescos.
La biblia nos habla que nosotros debemos mantener las cosas puras dentro de nosotros. Pues, se puede decir que somos neveras espirituales. Hay varias cosas en nuestras vidas que debemos conservar puro. ¡Pues, gracias a Dios por las neveras!

1 Timoteo 5:22

No impongas con ligereza las manos a ninguno, ni participes en pecados ajenos. Consérvate puro” O sea, debes ser una nevera espiritual.

Retener la Sana Doctrina

(2 Tesalonicenses 2:15)

Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por. Muchas veces, las personas no le dan la importancia a la doctrina. Podemos tener muchas opiniones, pero debemos comprender que Dios tiene la ultima palabra. Especialmente, la doctrina pura del nuevo testamento. Podemos hacer cosas que aparenta ser buena pero debemos agradar a Dios en todo lo que El dice. Así lo hacían los discípulos en el primer siglo: Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones”. Hay que seguir el ejemplo de aquellos cristianos que se dedicaron en seguir la voluntad de Dios y no hacer las cosas a su manera. Cuando la doctrina se llena de falsa enseñanzas deja de ser sana doctrina. La doctrina se pudre como la comida cuando la nevera espiritual se apaga. Por eso debemos preservar y retener esa sana doctrina. La palabra del Señor dice: “Retén la forma de las sanas palabras que de mí oíste, en la fe y amor que es en Cristo Jesús” (2 Timoteo 1:13). Vemos que esta claro lo que estamos hablando: ¡Pues, Gracias a Dios por las Neveras que Mantiene la Doctrina Pura

carta nuestra

Las neveras espirituales mantienen al corazón (Proverbios 4:23)

Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida” Dios nos ha dado ese escudo de fe y la coraza de justicia para guardar nuestro corazón. El diablo trata de abrir nuestra nevera para tener expuesto el corazón. Satanás te ataca el corazón, por los sentimientos para engañarte. Es como la muchacha que se deja llevar por el corazón, por amor a la persona incorrecta, se deja llevar por los engaños del novio, se liga a el en matrimonio y sufrir las consecuencias después. Vemos muchos casos de esa índole. Así trabaja el diablo. ¡Gracias a Dios por las neveras del corazón!

 Las neveras espirituales preservan el alma (Hebreos 10:29)

“Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma”. Lo que aquí indica es que el mecanismo para mantener de esa nevera espiritual funcionando es la fe en el Hijo de Dios para la preservación del Alma. ¿Qué más podemos pedir?

Las neveras espirituales mantienen los frutos espirituales

Las neveras conservan las frutas y vegetales frescos. Es nuestro deseo que mantengamos los frutos espirituales frescos. Los frutos de nuestras acciones son importantes para Dios y para las personas que disfrutan los frutos de nuestras vidas. Dice en 1 Pedro 2:12 Manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras. Los frutos son una demostración de crecimiento espiritual, pero mayormente, para servir a los demás; especialmente para Dios: Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre ¿Estamos claros en esto?
Las neveras no trabajan si se mantienen abiertas. Debemos limpiar por debajo y atrás donde se acumulan sucio. Debemos sacar el sucio de nuestras vidas. La nevera espiritual con la luz de Cristo y el poder de Dios, el evangelio. Necesitamos el Espíritu Santo para tener esas fuerzas.

¿Está en función esa nevera espiritual?

¡Gracias a Dios por las neveras!



Las Etiquetas son para las Latas No para los Cristianos


Las Etiquetas son para las Latas…

¿Eres Liberal o Conservador?
Un hermano de la Iglesia de Cristo me preguntaba: “¿Eres un cristiano Liberal o Conservador? Lo primero que se viene a la mente la política. Al principio note un poco raro la pregunta, porque nunca me he clasificado como liberal o conservador, sino un cristiano fiel. Me pregunto de nuevo si la congregación a donde yo asisto tiene una cocina. Ya yo sabía, entonces, el motivo de su pregunta. Le aclare que: Las etiquetas son para las latas y no para los cristianos.

Los discípulos del primer siglo no tuvieron etiquetas

Eran simplemente cristianos sin ningún otro apellido, ni nombres, ni etiquetas. Y se congregaron allí todo un año con la iglesia, y enseñaron a mucha gente; y a los discípulos se les llamó cristianos por primera vez en Antioquía” (Hechos 11:26). En ninguna parte en el nuevo testamento encontramos cristianos clasificándose como liberales o conservador. Hubo una vez en la historia de la iglesia primitiva que se llamaban por las personas que los bautizaban. En 1 Corintios 1:12 el apóstol Pablo veía mal que se clasificaban (denominaban) como cristianos de fulano de tal: “Quiero decir, que cada uno de vosotros dice: Yo soy de Pablo; y yo de Apolos; y yo de Cefas; y yo de Cristo”.

Pablo los llamo “Contiendas”

“Porque he sido informado acerca de vosotros, hermanos míos, por los de Cloé, que hay entre vosotros contiendas” (1 Corintios 1:11). Podemos decir entonces que en ponerse como cristiano liberal, conservador, adventista, bautista o pentecostal es una señal de contiendas. Honra es del hombre dejar la contienda; Mas todo insensato se envolverá en ella (Proverbios 20:3)


Pablo los llamo “divisiones”

“Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer” (1 Corintios 1:10).

Cristo no quiere contiendas o divisiones

Cristo oró por la unidad de los discípulos y de todos los creyentes. “Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste” (Juan 17:20-21). Esta plegaria de nuestro Señor Jesucristo demuestra su deseo en que estemos en un mismo espíritu de unidad, no de contiendas y divisiones. Es la voluntad de Cristo y me imagino que se entristece cada vez que algún hermano se clasifique mejor que el otro cristiano.

El Caso del Fariseo y Publicano

Es un caso de legalismo y de gracia. Todo sabemos la historia del fariseo y el publicano. Leemos en Lucas 18:10-14 – “Dos hombres subieron al templo a orar: uno era fariseo, y el otro publicano. El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; ayuno dos veces a la semana, doy diezmos de todo lo que gano. Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador. Os digo que éste descendió a su casa justificado antes que el otro; porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se humilla será enaltecido” El cristiano que se clasifica como conservador se justifica por las cosas que hace, como el fariseo. Pero el cristiano verdadero se deja llevar por la misericordia y Gracia de Dios. El cristiano verdadero se humilla y le agradece a Dios por su inmenso AMOR y la obra de Jesús en la cruz para rescatarnos. “Se propicio a mi pecador” El cristiano no se enaltece porque es un conservador. El cristiano se humilla porque es fiel al Señor.

El cristiano fiel considera a los demás que a si mismo (Filipenses 2:3-4)

Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo; no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros” Esa debe ser la actitud de un cristiano verdadero. Cristo fue el mejor ejemplo de esto: Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres” (Filipenses 2:5-7). Ahora es que podemos entender la Gracia de Dios y no tener sentimientos de superioridad, ni de legalismo sino con un espíritu humilde y de mansedumbre.
Con mucho amor digo estas cosas. No quiero ofender a mis hermanos. Yo no los veo como conservadores, ni liberal. Yo los veo como lavados en la sangre del Cordero: “Yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación, y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero” (Apocalipsis 7:14). El cristianismo verdadero no consiste en las etiquetas. Consiste en que todos entremos por las puertas de la ciudad celestial: “Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, y para entrar por las puertas en la ciudad” (Apocalipsis 22:14)

Dios mira y conoce al corazón sincero (1 Crónicas 28:9)

“Y tú, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, y sírvele con corazón perfecto y con ánimo voluntario; porque Jehová escudriña los corazones de todos, y entiende todo intento de los pensamientos. Si tú le buscares, lo hallarás; mas si lo dejares, él te desechará para siempre”

Dios ama a aquellos que sigue la sana doctrina (Mateo 15:8-9)

“Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran, Enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres” Dios conoce a aquellos corazones que están lejos de Él. Lo importante es seamos cristianos fieles, no porque tenemos que hacer las cosas de cierta manera, sino que la hagamos con sinceridad de corazón. “Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él” – Colosenses 3:17

La Unica Etiqueta (Galatas 3:27)

"porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos". La unica etiqueta es la que Cristo nos da. Somos sellados por el Espiritu Santo como Cristianos solamente. 

¿Qué clase de cristiano eres?

Somos del Señor

 "Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos, o que muramos, del Señor somos"