Dios está Aquí
Los veinticuatro ancianos se
postran delante del que está sentado en el trono, y adoran al que vive por los
siglos de los siglos, y echan sus coronas delante del trono, diciendo: 11 Señor,
digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas
las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas – Apocalipsis 4:10-11
Esto no se ve a menudo en los
conciertos de cantantes famosos como en los años 1950-1960. Ver muchachas
desmayándose durante el concierto, especialmente cuando el cantante las mira.
Esto se puede llamar una reacción automática.
Los 24 ancianos de
Apocalipsis 4 no se pueden comparar con estas niñas pero se puede decir que la
reacción automática de postrarse ante la presencia de Dios. “Cara a cara espero
verle, más allá del cielo azul”. Lo primero que voy a hacer es postrarme y
adorarle. Me imagino que muchos de ustedes van a ser lo mismo. La realidad es
ante Él se doblara toda rodilla.
Dice en Romanos 14:11 – “Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda
rodilla, Y toda lengua confesará a Dios”. Todos nosotros
(salvos y no salvos) vamos a tener que postrarnos ante la presencia de Dios en
humillación y gozo para los salvos; miedo y temblor para aquellos que no
obedecieron el evangelio de Cristo pero será muy tarde. Dice la Palabra del
Señor en 2 Tesalonicenses 1:6-8 –
6 Porque es justo delante de Dios pagar con
tribulación a los que os atribulan, 7 y a vosotros que sois atribulados, daros reposo con nosotros,
cuando se manifieste el Señor Jesús desde el cielo con los ángeles de su poder, 8 en llama de fuego, para dar retribución a los que no
conocieron a Dios, ni obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesucristo
Es mejor no esperar
postrarnos ante la presencia de Dios antes que llegue el Juicio Final.
Vemos en la Biblia personas
que se postraron automáticamente para adorar a Dios o cerrar los ojos y bajar
nuestros rostros ante la presencia de Dios:
Ezequiel 1:28 – Esta fue
la visión de la semejanza de la gloria de Jehová. Y cuando yo la vi, me postré
sobre mi rostro, y oí la voz de uno que hablaba.
Daniel
8:17-18 – Vino luego cerca de donde yo estaba; y con su venida me asombré, y
me postré sobre mi rostro. Pero él me dijo: Entiende, hijo de hombre,
porque la visión es para el tiempo del fin. Mientras él hablaba conmigo,
caí dormido en tierra sobre mi rostro; y él me tocó, y me hizo estar en pie.
Hechos 9:4 – y cayendo en tierra, oyó una voz que le
decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?
Apocalipsis 1:17 – Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra
sobre mí, diciéndome: No temas; yo soy el primero y el último.
Debemos vivir como si
Jesucristo estuviera con nosotros. ¿Sabes qué? Ya Jesús está con nosotros:
“Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio
de ellos” (Mateo 18:20). Ya que Jesús está aquí vamos a postrarnos como
hicieron los 24 ancianos. Vamos a quitarnos las coronas y darle honor a quien
honor se merece.
Como dije al principio es
mejor postrarnos ante Dios antes que estemos cara a cara en el juicio final. Es
mejor humillarse delante de Dios ahora en vez de esperar en el Juicio del Gran
Trono Blanco. Dice la Palabra Divina de Dios: “Humillaos delante del Señor, y
él os exaltará” (Santiago 4:10).
Un erudito del Nuevo Testamento llamado N.T.
Wright dijo: “Debes, por tanto, vivir en el presente lo más lejos posible como
vivirás en el futuro”. Comencemos planificando nuestra eternidad preparándonos
ahora. Postrados en Adoración en la presencia de Dios. Algún día estaremos en
la presencia de Dios. Si te humillas ante el Rey de reyes y Señor de señores y
haces que Jesús sea el Señor de nuestras vidas en bautismo, El estará contigo
por siempre. ¡Dios con Nosotros! “Emanuel”.